Campaña: celulares para los niños de un 4° básico.

Mañana comenzaremos una nueva etapa en nuestro colegio: clases online de manera más regular. Hasta ahora -y después de mucho trabajo- ya tengo 20 de 31 alumnos conectados con sus cuentas institucionales y que ya se han unido a sus clases de Classroom.

Un problema que existe es que son varios los que sencillamente no cuentan con computadores ni con teléfonos para conectarse (las razones son varias).
En vez de simplemente lamentarlo, quiero unirme a todos los que quieran colaborar para ayudar a mis chicos y chicas de 4° básico de un colegio cristiano ubicado en un sector popular de Viña del Mar.

Me encantaría comprar o conseguir 5 celulares (nuevos o usados) que se puedan conectar a internet, para dárselos y permitirles estar presentes junto a sus compañeros en las clases por videoconferencia. Especialmente son tres los casos más críticos que conozco.

A una mamá le dije que Dios me ha provisto milagrosamente muchas veces en la vida, y que voy a orar para que Dios provea. Ella no sabe de esta pequeña campaña, pero sé que es una forma de encauzar la provisión de Dios.

Desde ahora hasta el domingo 16 de agosto (día de mi cumpleaños, por lo demás) voy a estar comunicándoles cómo nos va en esta misión.
Que nadie dé por lástima ni por obligación, sino que lo haga con alegría.

Cariños para todos!!!

20 años después de nuestro egreso de la Universidad.

Ayer tuvimos la feliz esxperiencia de reunirnos muchos ex alumnos (la mayoría mujeres, en realidad) de la carrera de Pedagogía en Educación General Básica, de la Universidad de Playa Ancha de Ciencias de la Educación.

Paula Arenas creó un grupo de WhatsApp el sábado 23 de mayo, y en poco tiempo llegamos a ser 32 contactados. En esta primera semana hemos traído a la memoria lindos recuerdos de nuestra vida universitaria, al cumplirse 20 años de habernos titulado.

Uno de los aspectos que más destaco de la video conferencia de anoche fue que siempre noté un ambiente de compañerismo y no de competencia. Unos llevan 20 años trabajando en una misma escuela, otros han estado en muchas, algunas han dejado la docencia para dedicarse al hogar, algunos se han especializado, en fin, hay una diversidad de historias.

Según capté entre quienes nos reunimos ayer, las más lejanas están en Puerto Montt y en Rapa Nui… así que fue inevitable para varios imaginarnos visitando a las antiguas amistades.

Un significado especial tuvo para mí, compartir un espacio con mis dos compañeras de tesis, es decir, con Kennah Astorga y Marcela Páez. ¡Me encantaría reunirme con ellas y con nuestras familias!

Mi primer curso de Scratch

Entre las tantas y tan variadas opciones que existen para tomar cursos por internet, se encuentran los ofrecidos por Jóvenes Programadores, ofrecidos a alumnos desde los 8 años de edad y a profesores (en realidad, cualquier persona puede tomarlos, ya que no se necesita estar matriculado en un establecimiento educacional).

Me interesan los de diseño de página web, pero seguí el consejo de partir con el curso introductorio, que trata de los pasos básicos en el lenguaje visual de Scratch.

El manual de estte curso dice que se puede terminar en 6 horas, y efectivamente, eso es lo que tardé en completarlo, y como consecuencia, me emitieron el certificado que exhibo al inicio de este post.

Te comparto a continuación la información que hoy recibí y que te conducirá a la plataforma de Jóvenes Programadores. Espero que aprendas harto.

¡ATENCIÓN DOCENTE!
 Le saluda Jóvenes Programadores, iniciativa del programa BiblioRedes del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, que tiene por objetivo promover la enseñanza de la programación para cualquier persona desde los 8 años, razón por la cual, le invitamos a inscribirse en nuestra convocatoria 2020 que se implementa por séptimo año consecutivo y ya tiene más de 100 mil personas inscritas.
También puede inscribir a sus estudiantes, incluso después de las vacaciones de invierno, o en cualquier momento del año, ya que ofrecemos cursos vinculados al curriculum nacional y dirigidos al sector escolar.  
Ofrecemos 22 cursos de programación gratuitos y con modalidad online
 Tenemos cursos de introducción a la programación con Scratch, creación de aplicaciones móviles, videojuegos, diseño de páginas web y muchos más. Cada curso cuenta con certificado y un tutor/a que le ayudará en su proceso de aprendizaje.  
 Ofrecemos 3 cursos exclusivos para docentes, los cuales entregan orientaciones metodológicas para utilizar nuestros cursos como recurso para sus clases. Si desea inscribirse haga clic en “inscríbete aquí”  y seleccione “crear una cuenta”.

Para ingresar a la plataforma e incribirte, haz clic aquí.
Para ver el listado de cursos, clic aquí.

Gestos notables de mis alumnos

Se siguen sumando las bellas experiencias en mi nuevo curso.

Hoy les planteé un doble desafío, pero antes, les aclaré que como profesor jefe tengo la atribución de asignar donde se sentarán los alumnos… y que en un curso que tomé en el verano -con la Fundación Astoreca- aprendí que existen algunas recomendaciones importantes a considerar al tomar ese tipo de decisiones.

Por ejemplo, les dije que es ideal que ciertos alumnos que tienen más necesidades educativas estén en los pasillos centrales y adelante, más cerca del profesor y del pizarrón. En ese momento les planteé la primera pregunta difícil: ¿Quíénes de ustedes consideran que están en esa condición y que requieren de una ayuda especial? Era arriesgada la interrogante, pero fue sorprendente que tres levantaron la mano (estos días también he estado trabajando la idea de la cultura del error, de la que tal vez hable otro día).

A continuación, planteé el segundo desafío: ¿Quiénes de los alumnos que por ejemplo han tenido buenos promedios el año pasado, estarían dispuestos a sentarse al lado de estos tres alumnos, por este mes, con el fin de servir de ayuda?

¡De inmediato, 5 levantaron la mano! Los felicité y gestioné los respectivos cambios. Todos quedamos felices y yo quedé muy emocionado por la reacción de amor al prójimo (que de paso es el valor que estamos tratando en los devocionales de este mes).

Pero eso no fue todo, porque uno de los solidarios después se acercó para decirme que como este cambio será por este mes, él pensaba que en abril podría estar al lado de otro compañero, para ayudarle.

¡Dios bendiga el tierno corazón de estos niños!

Retrato del Profesor Bandurria

profesor bandurria

En el baúl de los recuerdos encontré este dibujo que me regaló mi alumno de 3° básico -Luciano Ibarra- en agosto del año 2005, allá en el Colegio Gracia y Paz, de Temuco.

Sencillamente, me encanta. A él se le ocurrió ponerme cabeza de las aves que tanto me gustan.

Recuerdo que era simpático cuando al inicio de la jornada escolar saludaba a los alumnos diciéndoles: ¡Buenos días niños y niñas!

Y ellos respondían: ¡Buenos días, Profesor Bandurria!

También me acuerdo que cuando pasaban bandurrias por sobre el colegio, mis estudiantes me decían: ¡Mire, ahí va usted!

Durante muchos años dejé de ser conocido con este nombre, pero al crear este sitio web decidí sacar de las cenizas a mi antigua identidad pedagógica.

¡Profesor Bandurria!

Corría el domingo 9 de febrero de 2020. Junto a mi familia me encontraba visitando una iglesia en Temuco. Cuando se da un tiempo para saludarnos unos a otros, recibo una gran alegría cuando se acerca Marcela Roa y me dice: ¡Profesor Bandurria!

Marcela fue apoderada de un recordado alumno en el Colegio Gracia y Paz, de Temuco, entre los años 2004 y 2005 (2° y 3° básico). En ese tiempo yo era conocido como el Profesor Bandurria, así que su expresión estuvo correctísima.

Entre las cosas interesantes que ocurrieron en ese encuetro, figuran las siguientes:

  1. Me acordaba que su hijo se llama Richard Benjamín Yagi Roa.
  2. Ella recordaba hasta una anécdota que yo conté en una reunión de apoderados.

Fue una experiencia muy grata compartir con Marcela (también recuerdo que una vez le pedí que me ayude a dar una clase de educación física y ella lo hizo genial). Ella tenía en mente que mis alumnos se desarrollaban en un ambiente muy acogedor y con altas exigencias académicas. ¡Qué importante y qué lindo!

Unos días después estuvimos visitando a unos amigos en Pucón, y tuve la dicha de tomar unas fotos de una bandurria que estaba en su patio (para los que no conocen estas aves, tan típicas de la región).

Desde que dejé ese colegio y ese curso (para dedicarme al ministerio de la Palabra) nadie me ha llamado por mi sobrenombre docente. Espero que este año pueda renacer, con mis alumnos de cuarto básico del Colegio Eben Ezer, de Viña del Mar.